Intentar comprender el mundo de la belleza no es tarea fácil. Lo que puede parecernos un simple asunto estético, es en realidad mucho más complejo. Al fin y al cabo, las personas, y en especial las mujeres, contienen una gran herencia del pasado, condicionantes sociales, deseos o miedos que le hacen preocuparse por su cabello.
No podemos pretender asesorar sobre la imagen de una mujer basándonos solo en factores externos como la forma de su rostro o el tono de su piel. Sería un grave error como profesionales dejar la empatía a un lado y no preguntarnos, ¿por qué es tan importante para una mujer su cabello?
El término “Islam” significa entregarse a Dios, y es por ello que la mujer musulmana debe cubrir su cabello, según lo ordenado por el Sagrado Corán. Si una mujer se cubre, entonces las miradas corruptas y obscenas sabrán que allí no hay nada para ver, y así Dios protegerá a la mujer musulmana de personas vulgares y hasta peligrosas.
Hace unos meses, una estudiante nipona presentó una denuncia contra su escuela en Osaka (Japón) por haberla obligado a teñirse el pelo de negro para ir a clase, ya que su color castaño natural algo inusual en su país.
Muchas mujeres afroamericanas vieron algo normal alisarse el cabello como símbolo de alineación a la raza blanca. En respuesta, el pelo rizado fue usado como un símbolo por los movimientos activistas negros, como las Panteras Negras en Estados Unidos durante la década los años 60-70, que reivindicación una identidad desalienada y orgullosa de sí misma.
Estos son solo escasos ejemplos de lo que de hasta donde puede llegar la estética del cabello y cuántas implicaciones debe tener desde la infancia de una niña hasta que es anciana. Debemos un respeto cuando una mujer acude a la peluquería con el deseo de encontrar su identidad en su cabello, con hacer las paces con él y con lo que desea o necesita representar de sí misma.
Nosotros tratamos con un gran número de mujeres diariamente, las escuchamos, y lo que es más importante sabemos con seguridad arriesgarnos y proponerles un cambio. En ocasiones, ese cambio puede asustarles pero lo respalda un buen motivo, y es que ya hemos vivido ese proceso en otras clientas y como profesionales sabemos que la semilla del cambio era lo que ella ya llevaba dentro. Un viaje de vuelta a su propia belleza.
Bellezas muy diferentes en el Espacio Isaac Salido
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